Vivir ligado a un eterno punto de tu vida que parece ser inmutable.
Así das todo tu ser, de tal manera que no ves un futuro,
porque, ¿qué futuro cabe esperar de alguien que ha sido consumido?
¿Que queda cuando terminas de pudrirte?
Carroña.
Esa es la vida del estudiante, o solo la mía.
Deberá llegar el día en que abran la jaula.
Para dejarte pasar a otra jaula.
El pájaro querría volar, lejos.
Yo me obligo a permanecer para demostrar algo.
Demostrarle al pájaro, que no es sino mi otro yo,
que se puede volar atado a la responsabilidad.
Yo juzgo, yo obedezco, yo lloro, y sólo yo padezco.
¿Y si con ello se disfruta?
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